Villamartín de Campos

Villamartín de Campos se encuentra a unos 15 km de Palencia tomando la N-610. Está a apenas 5 km de Autilla del Pino, lo que hace factible una visita por el Mirador de Campos, para deleitarse en todo su esplendor de esta zona de la provincia palentina. No hay que olvidarse de disfrutar las fiestas del pueblo en junio y agosto, en honor a San Antonio de Padua y San Salvador respectivamente. Además, en su casco urbano se encuentra Selectos de Castilla (productos de pato), protegidos por la Marca de Alimentos de Palencia; y se práctica un curioso deporte a caballo llamado Horseball.  

De titulo villa, fue donada por Alfonso VI al obispado de Palencia, del que se independizó durante el reinado de Carlos I. Durante las Comunidades de Castilla formó parte del bando comunero, al igual que muchas otras localidades palentinas, causándole tales problemas que tuvo que apelar al perdón real. En época Felipe II, fue vendida a Jerónimo López de Milla, vecino de Medina de Rioseco, y en el siglo XVIII, el mayorazgo lo administraba la familia Martín-Ovejero, donde fundaron una Casa-Palacio que destaca por su fachada rococó.  

En pleno casco urbano espera al visitante la Iglesia de San Salvador fechada en origen en el siglo XV, fue reedificada en el siglo XVII, alberga en su interior retablos neoclásicos del siglo siguiente, y en la espadaña un escudo. Sin embargo, documentos del siglo XIX hablan de dos ermitas, una dedicada a San Sebastián, junto al cementerio, y otra a Santa María, en las afueras. Pero Villamartín aún guarda sorpresas entre sus calles como son casa blasonadas, la casa de la Inquisición y el palacio de la familia Martín-Ovejero.