Iglesia de Santa Eugenia
La iglesia de Santa Eugenia parece fundarse en el siglo XIII, aunque de este período únicamente se ha conservado el cuerpo inferior de su esbelta torre. Posteriormente será reconstruida a lo largo del siglo XV, como ponen de manifiesto su capilla mayor, los arcosolios de la nave del evangelio y la portada principal. Sin embargo, el edificio que hoy contemplamos es fruto de una importante reforma realizada en el siglo XVI que transforma la antigua iglesia gótica en una construcción de una sola nave, con tres tramos de gran altura y capillas-hornacinas laterales. A mediados del siglo XVIII, el arquitecto Juan de Sagarvinaga realizará una nueva portada a los pies del templo.
Recientemente la iglesia de Santa Eugenia ha sido acondicionada como Museo Parroquial y en su interior se expone una interesante colección de obras de arte procedentes de las parroquias de la localidad y ermitas de su entorno. Destaca el retablo mayor de estilo hispanoflamenco, obra realizada a principios del siglo XVI, con relieves y esculturas de la vida de santa Eugenia (atribuido por algunos autores al taller de Gil de Siloe). En las capillas laterales se exponen buenas tallas renacentistas (entre las que cabe destacar el Cristo de Torre y las obras de Hernando de Nestosa o Juan Ortiz), dos excelentes esculturas góticas de la Virgen con el Niño, un mosaico del siglo IV, decorado con temas geométricos, procedente de la villa romana de El Oro, entre otras obras.
La visita al Museo se completa con las salas habilitadas en el coro y piso alto del pórtico, donde se ha reunido una colección de ropajes litúrgicos (algunos de ellos bordados en el siglo XVI), orfebrería religiosa (con piezas tan interesantes como las custodias de santa Eugenia y santa María, sin duda de las más bellas de la provincia) y varias esculturas y pinturas de los siglos XVI-XVIII.